miércoles, 24 de octubre de 2007

Al final de tus días

A partir de cierta edad, no importan las causas perdidas, no gritas por cambiar nada, ni pides que haya justicia, no te interesan los juegos, no piensas en la esperanza, ni tienes ya más anhelos que dormir de una tirada.

A partir de cierta edad, no te interesan los sueños, nada parece importante y nada te quita el sueño.

Te conforma una mirada, agradeces la sonrisa,
y te alegra simplemente el roce de una caricia.

Hoy, 14 de febrero de 2017, hace diez años que te fuiste... y así continúo recordando tus últimos días, mi padre querido.